Payne, España y nuestros prejuicios

Por Íñigo Madrid.


El 2 de mayo o La lucha con los mamelucos. Francisco de Goya. (Museo del Prado)


Que tenga que ser un estadounidense quien venga a nuestros lares a desmitificar y desmontar la falsa leyenda negra, que tanto daño nos ha hecho, no ayuda a eliminar nuestros complejos; pero sí nuestros prejuicios.

Hablo de Stanley G. Payne, historiador e hispanista norteamericano. Ya, como apriorismo, he de decir que me fascina toda persona que, demostrando una genuina humildad, dedica toda su vida a estudiar la historia de otros lugares. Y, a este pequeño país que llamamos España, se han dedicado multitud de intelectuales e historiadores extranjeros a lo largo de toda nuestra historia reciente; deuda que nunca terminaremos de saldar.

El caso es que Payne ha publicado un libro, «En defensa de España: desmontando mitos y leyendas negras», que ha cosechado –como es obvio, claro– un gran éxito. Esto, aparte de lo que más tarde hablaremos, reseña que poseemos una gran necesidad de que alguien de fuera nos venga a decir que no, que no somos tan necios.

El compatriota que practique eso que llamamos corrección política –no es más que cobardía mezclada con buenismo– leerá el título del libro, y se asustará. El pobre, inocente, está acostumbrado, desde que nació, a ver a su alrededor a acomplejados denigrando a su país; y, claro, eso de defender a España le suena un poco facha. Ay.

El libro, que terminé de leer hace una semana, realiza un recorrido por la historia de nuestro país, desde antes de Roma hasta nuestros días. Lo que hace del libro una lectura necesaria no es que se dedique únicamente a relatar nuestro pasado, no; es que al mismo tiempo, con una inmensa valentía, el autor analiza todos esos absurdos que creemos que hicimos, y de los que renegamos, invitando a reconciliarnos con ellos. Sois historia, no os achantéis ante ella, parece que nos dice.

La historia, como todo el mundo sabe, nunca se relata de forma objetiva, ni debe ser así. Payne hace lo propio, y a cada memorable acontecimiento de nuestra historia dedica unas lúcidas líneas a valorar, con enorme inteligencia, sus aportaciones y sus regresiones.
Es así como consigue que comencemos –su intención no es revisar, creo, o transmitirnos otro punto de vista de nuestra historia; sino provocar en nosotros la sensación de que, igual, no todo fue como pensamos– a depurar prejuicios, y a renovar juicios.

En un tiempo en que ya nada vale, en que se desprecia la historia, en que juzgamos nuestro pasado desde un sofá del siglo XXI, en que vivimos en el presente sin saber, ni apreciar, cómo y por qué hemos llegado a él; este libro contribuye a todo lo contrario. Apuesta por una no revanchista memoria histórica, que no debe ser más que un estudio historicista de las raíces de nuestro presente, desde la “psicología y la cultura de las épocas que se analizan”. Y contribuye, con acierto, a desnudar esa falacia que nos creímos llamada «leyenda negra».

Dice Payne que las críticas a España siempre han venido por parte de los españoles. Igual, después de varios siglos acomplejados, deberíamos salir, o no, en defensa de nuestro país. Defensa que se reduce a algo muy simple: patriotismo. Nada más, y nada menos.




Autor: Stanley G. Payne. Título: En defensa de España: desmontando mitos y leyendas negras. Editorial: Espasa. Venta: Amazon, Casa del Libro, Fnac.