Cuando el Tigre pudo con la Rata

Hong Kong vs China - Rodrigo (Fuente: https://es.toonpool.com/cartoons/Hong%20Kong%20vs%20China_232730#img9)

Podemos llamarlo como queramos: pérdida de nuestros valores, caída de las potencias occidentales, emergencia de China como nueva potencia mundial… Lo que está claro es que el famoso status quo, también conocido como orden mundial, ha cambiado de forma definitiva. Hemos de aceptar que este nuevo paradigma es, por primera vez en la historia de la humanidad, no beneficioso para el mundo “occidental”. Por mucho que nos queramos tapar los ojos y no darnos cuenta de lo que sucede a nuestro alrededor, cuando unos nuevos poderes emergen, los otros caen. Así funciona el mundo. La situación que viven actualmente en Hong Kong debería alertarnos mucho más de lo que lo hace, ya que su caída ante el gobierno chino es el aviso de todo lo que está por venir. 

Aunque las primeras protestas contra la recién aprobada Ley de Extradición de “criminales sospechosos” de Hong Kong a China fueron en 2019, el conflicto comienza años atrás. Concretamente, hablo de la entrada de China en 2001 en el comercio internacional al unirse a la Organización Mundial del Comercio. Las grandes potencias del momento, ilusas y esperanzadas por lo que ellas consideraban la “pseudo rendición” de China a los pies de occidente, se dejaron llevar por la idea de un nuevo mundo en el que todos habíamos aceptado el liberalismo económico de una vez por todas. Nada más lejos de la realidad, ya que China demostró al mundo ser capaz de todo lo contrario al convertirse en una potencia económica sin necesidad de renunciar al autoritarismo y las continuas violaciones de los derechos humanos. Paradójicamente, esto lo consiguió gracias al apoyo occidental: compramos sus baratos productos, invertimos en sus empresas, construimos sedes de las nuestras en territorio chino e hicimos la vista gorda en términos políticos.

El movimiento de 2019, que parece ahora haber llegado a su “fin”, no es más que la culminación de la conquista por la vía económica del orden mundial. Intentaré resumir brevemente cómo lo hicieron:

  • Área política: el miedo por las protestas y la elevada cantidad de votos obtenida por los prodemocracia en las elecciones de los consejos del distrito de Hong Kong generaron en el gobierno central cierta inquietud por las elecciones de órganos políticos más poderosos como las del Consejo Legislativo de Hong Kong (Legco). Estas elecciones iban a tener lugar en septiembre de 2020, pero acabaron siendo aplazadas, supuestamente, por la crisis de la COVID-19. Esta maniobra de aplazamiento llevada a cabo por el gobierno central les brindó la oportunidad de cambiar la ley electoral de Hong Kong en marzo de 2020, que ahora prohibiría presentarse a las elecciones del Legco a los opositores críticos con el régimen o a todos aquellos que no superasen unas estrictas “pruebas de patriotismo”. Y no quedó ahí, ya que, en junio del mismo año, las autoridades aprueban la Ley de Seguridad Nacional (NSL), una ley en la que se ampliaban los castigos a los crímenes por subversión del poder estatal o colusión con estados extranjeros. Además, aceptaba el traspaso de presos de Hong Kong por estos crímenes para ser juzgados a puerta cerrada y por jueces elegidos a dedo en territorio chino. 

  • Educación: en febrero de 2021, con el objetivo de reconquistar las mentes de los ciudadanos de Hong Kong, el gobierno central aprobó una nueva ley educativa que incluía la memorización de delitos incluidos en la NSL y una visión más amable del gobierno del país.

  • Censura: en abril de 2020, se produce el arresto de 15 personalidades relevantes de la oposición. Tras la aprobación de la NSL, la censura y la libertad de elección se han visto gravemente afectadas. Según The Economist, desde el inicio de las revueltas, el porcentaje de legisladores elegidos de forma directa por los ciudadanos de Hong Kong ha pasado del 55% al 22%. 

  • Papel del mundo occidental: cuando hay algo que no gusta a las potencias occidentales, estas son muy dadas a la imposición de sanciones económicas (como guerras comerciales o aranceles) para forzar a los países a volver al camino que ellos consideran como el adecuado. Esta vez, Xi Jinping los adelanta por la izquierda. En los últimos años, el gobierno chino se ha focalizado en volverse autosuficiente para evitar presiones por la vía económica. Es decir, en cierto modo, llevan a cabo un proceso de desglobalización en aquellas áreas que consideran más sensibles para no depender de los intereses de occidente.

  • Economía: Hong Kong es una de las grandes capitales financieras mundiales. Podríamos pensar que su nueva situación más restrictiva desmotivaría a los inversores internacionales. No obstante, la bolsa de valores de Hong Kong está que arde. Las grandes empresas chinas como Tencent, Xiaomi o Alibaba cotizan en su Ibex 35 -llamado índice Hang Seng– y el valor de sus acciones no hace más que subir. 

Las potencias occidentales deben pensar ahora en cómo intervenir en la cuestión sin caer en banalidades. Me refiero a esa mochila de salvadores del mundo que nos hemos impuesto y que, con relativa frecuencia, huele un poco a neoimperialismo. Realmente, deben pensar en qué mundo quieren vivir y trazar una estrategia lo suficientemente inteligente como para equilibrar la balanza de poder mundial que cada día les es menos favorable. La pregunta es: ¿qué pueden hacer ahora que no cuentan con los mecanismos de presión económica de los que se han valido hasta el momento? ¿Qué queda cuando la diplomacia y la economía se quedan cortas? 

Francamente, nos queda tener fe en que los grandes inversores se den cuenta de la repercusión de sus acciones y la lucha por las grandes causas, como los derechos humanos. Para mí, la solución la tenemos en las narices y, en cierto modo, ya hemos empezado a poner cartas en el asunto. La solución ha empezado en Xinjiang



Fuentes: bbc.com; elconfidencial.com; france24.com; dw.com


Por Marta Molina Urosa


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